Haití y los Objetivos del Milenio

Durante esta semana, la Presidencia española de la Unión Europea, ha trabajado en los campos sociales, energéticos, sanitarios, culturales, tecnológicos, medio ambientales...

La tragedia de Haití ha supuesto un golpe tremendo para un país que ya estaba en una situación terrible. España, como país, y como Presidente de la Unión Europea, se está volcando en enviar ayuda propia, y en coordinar la de la Unión Europea. Muchos son los trabajadores que ya han acudido allí: bomberos, médicos, expertos en catástrofes..., y mucha es la ayuda enviada. La Vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega se encuentra en Haití para conocer las necesidades sobre el terreno y para que esas necesidades sean transmitidas, tanto al Gobierno de España como a la Unión Europea, con la máxima celeridad y precisión, y conseguir así que la respuesta sea igual de rápida y precisa.

Toca ahora un esfuerzo por parte de los gobiernos y de la sociedad en general para paliar, en la medida de lo posible, el drama humano que están viviendo los haitianos.

Pero toca también reflexionar. El cumplimiento de los Objetivos del Milenio debe ser ya, sin más dilación, el objetivo irrenunciable de todos los países del primer mundo. La ONU, con el apoyo claro de la Unión Europea liderada por el Gobierno de España, debe ponerse al frente de una acción decidida a conseguir que los Objetivos del Milenio sean una realidad lo antes posible.

Los Objetivos del Milenio son irrenunciables. Los gobiernos y las organizaciones internacionales deben liderar a la sociedad para lograr su cumplimiento.